Un pequeño porcentaje de los 146 000 miembros de la UAW abandonaron el trabajo el viernes en tres fábricas pertenecientes a General Motors, Ford y Stellantis, pero los expertos dicen que los efectos de una huelga prolongada podrían llegar pronto a los consumidores.
DETROIT (AP) – Alrededor de 13.000 trabajadores de automóviles han abandonado el trabajo en tres fábricas específicas después de que sus líderes sindicales no pudieran llegar a un acuerdo con los fabricantes de automóviles de Detroit.
El sindicato United Auto Workers está buscando grandes aumentos y mejores beneficios de General Motors, Ford y Stellantis. Quieren recuperar las concesiones que los trabajadores hicieron hace años, cuando las empresas estaban en problemas financieros.
Un pequeño porcentaje de los 146.000 miembros del sindicato abandonaron el trabajo en una planta de ensamblaje de GM en Wentzville, Missouri; una fábrica de Ford en Wayne, Michigan, cerca de Detroit; y una planta de Stellantis Jeep en Toledo, Ohio, a las 11:59 p.m.
Shawn Fain, el combativo presidente de la UAW, dice que las huelgas dirigidas le darán al sindicato influencia en las conversaciones contractuales y mantendrán a las compañías de automóviles adivinando sobre su próximo movimiento.
