Las funcionarias visitaron el Cañón del Combeima, joya natural de la capital del Tolima, para conocer el desarrollo de inversiones ambientales.
Como parte de la celebración de los 474 años de Ibagué, la gobernadora Adriana Magali Matiz y la directora general de la Corporación Autónoma Regional del Tolima, Olga Lucía Alfonso Iannini, llegaron al Cañón del Combeima para compartir con lideresas y gestoras que apoyan la conservación y preservación de los recursos naturales de la ciudad.
En la jornada, que inició en el Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre (CAV) de Cortolima, las funcionarias sostuvieron un encuentro con las ‘Mujeres del Cañón’, el grupo de 45 madres cabeza de familia que a través de campañas de sensibilización buscan crear conciencia sobre el cuidado del medio ambiente en este sector rural de Ibagué.
Las llamadas ‘Guardianas de la naturaleza’ le contaron a Matiz y Alfonso cómo adelantan los procesos de educación ambiental con las poblaciones local y visitante del Cañón del Combeima, y la manera en la que desarrollan procesos de formación en restauración ecológica, buenas prácticas ambientales y manejo de viveros.
Justamente, la gobernadora y la directora aprovecharon su visita a las instalaciones del CAV para conocer el cultivo de plántulas en el vivero de Cortolima, el cual cuenta con acreditación del Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) por sus excelentes condiciones fitosanitarias y de desarrollo en la producción de material vegetal.
Gracias al buen manejo del vivero, Cortolima ha entregado a las comunidades tolimenses especies como chirlobirlo, gualanday, matarratón, balso, ceiba bonga, yarumo, casco de vaca, totumo, carbonero y cachimbo, entre otras.
Las funcionarias cerraron su jornada en la vereda Puerto Perú, para conocer de cerca cómo mejoró la calidad de vida de Miriam Farfán, beneficiaria de una estufa ecoeficiente, la cual le ha permitido mitigar el consumo de leña, las probabilidades de desarrollar enfermedades respiratorias por inhalación de humo y la degradación del bosque.
En este sector, Matiz y Alfonso también sembraron plántulas de especies nativas, como chirlobirlo, gualanday, cachimbo y carbonero, para enviar a la ciudadanía un mensaje de protección, cuidado y preservación del Cañón del Combeima, considerado un verdadero santuario de fauna y flora de los ibaguereños.