Las autoridades sanitarias, ya están generando los cercos epidemiológicos para evitar la propagación de la enfermedad.
La Administración Municipal está analizando dos posibles positivos por fiebre amarilla en las comunas Siete y Diez. Estos casos corresponden a dos hombres, uno de 18 años y otro de 72, que entraron a observación para confirmar su estado.
“Hemos tomado acciones contundentes para detectar los casos sintomáticos y asintomáticos de fiebre amarilla. Por eso, estamos haciendo un barrido casa a casa, en los sectores donde habitan estos pacientes”, dijo Liliana Ospina, secretaria de Salud Municipal.
De igual manera, la funcionaria advirtió que “esta enfermedad no es un juego y puede cobrar la vida de muchas personas. Por eso, invitamos a que todos nos vacunemos acudiendo a los 16 puntos que ubicamos en toda la ciudad”.
Los síntomas de la fiebre amarilla van desde un dolor muscular y de cabeza, escalofríos, pérdida del apetito hasta náuseas o vómitos, estos dentro de los primeros seis días de aparición.
Pero al entrar en una fase tóxica vuelve la fiebre alta y la afectación de varios sistemas del cuerpo. Además, la función renal se deteriora y la mitad de los pacientes que pasan a otra fase dentro de los siguientes 10 a 14 días pueden llegar a la muerte.