Enrique revela cómo los castillos y propiedades reales tienen tanto de tradición como de cartón piedra, en un libro que ya esta en los estantes de todas las librerías del mundo
*Por: Enrique Rubio. Londres (EFE).- El rostro pelirrojo del príncipe Enrique se adueñó de escaparates y mostradores en el Reino Unido con el lanzamiento, precedido por el alboroto y la polémica, de su libro de memorias.
El volumen -titulado en español «En la sombra» y en inglés «Spare» (repuesto)- goza de una tirada masiva que lo ha hecho, desde antes de su salida, el más vendido del país gracias a las prerreservas. Horas después de su lanzamiento, la editorial Transworld Penguin Random House aseguró que la controvertida autobiografía se ha convertido en el libro de no ficción más vendido durante su primer día en las librerías, con más de 400.000 copias colocadas.
En primer lugar, porque tras su publicación por error en España la semana pasada, los medios británicos ya han desgranado sus partes más morbosas. También porque el propio Enrique, hijo pequeño del rey Carlos III, se ha ocupado de lanzar varias cargas de profundidad en las entrevistas de promoción del libro.
Se sabía, por ejemplo, de su pésima relación con su hermano Guillermo, heredero de la Corona, que incluso llegó al enfrentamiento físico. Se conocían igualmente sus peripecias bélicas en la guerra de Afganistán, donde mató, según escribe, a 25 afganos como si fuesen «piezas de ajedrez». Aunque si algo trasluce de su lectura, desde antes incluso de la primera página, es que se trata del retrato de un hombre todavía joven (38 años) pero atrapado en su turbulento pasado.
«El pasado nunca está muerto. No es ni siquiera pasado». Con esta cita atribuida al escritor estadounidense William Faulkner, que sirve de epígrafe del libro, Enrique marca el tono sombrío de las páginas que están por venir. Y con la misma ingenuidad que recorre toda la obra reconoce cómo se topó con esa frase en una web de citas «inspiradoras».
No duda en desvelar desde el inicio su obsesión con la figura de su madre, la princesa Diana, que murió en accidente de tráfico en París en 1997, o su compleja relación con Guillermo («mi querido hermano, mi archienemigo»), a quien atiza a veces de forma infantil («su alarmante alopecia, más avanzada que la mía»).
Los medios británicos han destacado de «En la sombra» (editado por Penguin Random House) que supone una inmersión sin apenas precedentes en la intimidad de la casa de los Windsor. Enrique revela cómo los castillos y propiedades reales tienen tanto de tradición como de cartón piedra, una puesta en escena concebida para subrayar la inmutabilidad de la institución: «En Balmoral todo era antiguo o estaba hecho para parecerlo».