Para Rusia se trata de una respuesta “apropiada” a las “acciones hostiles” de las “autoridades estadounidenses y de quienes les sirven”, porque “fomentan la rusofobia”
(ANSA) – ROMA. Casi mil ciudadanos estadounidenses, empezando por el presidente estadounidense Joe Biden, pero también personalidades no políticas como el magnate tecnológico Mark Zuckerberg y el actor Morgan Freeman, ya no podrán pisar Rusia.
La lista de nombres, publicada por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Moscú, surge en respuesta a las sanciones y amplía la brecha con Washington en el contexto del conflicto en Ucrania.
En el frente pro-Kiev, despunta Londres quien eleva el nivel de oposición con los rusos, proponiendo a los aliados suministrar armas modernas también a Moldavia, que según sus evaluaciones está a riesgo de ser también invadida por el Kremlin
La prohibición “permanente” en Rusia para 963 estadounidenses afectará a la alta dirección de la administración estadounidense, desde el presidente hasta la diputada Kamala Harris, pasando por el secretario de Estado Antony Blinken, el jefe del Pentágono Lloyd Austin y el de la CIA. Guillermo Burns.
El hijo de Biden, Hunter, y la ex primera dama Hillary Clinton también han sido objeto de ataques, y la lista negra se ha ampliado a figuras que, sin embargo, son muy influyentes en Estados Unidos e internacionalmente. Como el fundador de Facebook Mark Zuckerberg y la estrella de Hollywood Morgan Freeman. Este último acusado en particular de haber grabado un vídeo en 2017 en el que aseguraba que Moscú conspiraba contra Estados Unidos.
También se añadieron a la lista negra 26 ciudadanos canadienses, entre ellos la esposa del primer ministro Justin Trudeau, como parte de una nueva contraofensiva diplomática que en los últimos días había desembocado en la expulsión de decenas de diplomáticos italianos, españoles y franceses en respuesta a la expulsión de el personal ruso de Roma, Madrid y París.