La UNGRD verificó, en conjunto con las entidades del SNGRD y las autoridades municipales, que algunos sectores de 40 veredas ubicadas en Herveo, Casabianca, Villahermosa, Líbano y Murillo, en el departamento del Tolima, y nueve en el municipio de Villamaría, en Caldas, se encuentran dentro del perímetro de amenaza alta y deben evacuar de manera preventiva
La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) reitera el llamado a las entidades del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (SNGRD), a las autoridades territoriales y a las comunidades ubicadas en la zona de amenaza a continuar con las acciones de preparación para la respuesta por el nivel de actividad naranja que está registrando el volcán Nevado del Ruiz.
“Les pedimos a los consejos municipales y departamentales de gestión del riesgo de desastres a seguir trabajando de manera articulada con las autoridades territoriales y las comunidades, para garantizar una preparación efectiva para la respuesta por el nivel de actividad naranja del Nevado del Ruiz. Si bien el volcán registra signos de disminución en los últimos días, sigue siendo inestable”, dijo el director general de la UNGRD, Olmedo López.
En este sentido, la UNGRD recomienda revisar y actualizar las estrategias de respuesta a emergencias y los protocolos de riesgo por actividad volcánica. Asimismo, verificar las acciones internas de las organizaciones con el fin de garantizar la continuidad del funcionamiento institucional en caso de afectarse por el fenómeno natural y solicitar los planes de emergencia y contingencia a las entidades públicas y privadas encargadas de la prestación de servicios públicos, obras civiles o que desarrollen actividades industriales.
De igual forma, se deben identificar y habilitar instalaciones que funcionen como alojamientos temporales, revisar y actualizar los planes de evacuación con la identificación y señalización de las rutas de evacuación y los puntos de encuentro. También, implementar mecanismos para la difusión de la alerta a las poblaciones rurales y urbanas, en un trabajo conjunto con las comunidades.
Es necesario realizar simulacros de evacuación en las zonas que podrían verse afectadas por lahares, para evaluar el tiempo de respuesta de las personas frente a la inminente llegada de un flujo de este tipo, y brindarles la oportunidad de familiarizarse con las rutas de evacuación y los puntos de encuentro.
Las poblaciones que se encuentran en amenaza alta, ubicadas a distancias mayores a los 15 kilómetros al cráter Arenas, deben tener en cuenta que el flujo de lahares podría desplazarse por el río Gualí, desde su nacimiento hasta la desembocadura en el río Magdalena. Involucraría a los municipios de Herveo, Fresno, Mariquita, Honda, Falan, Palocabildo y Casabianca, en el Tolima, y a Guaduas, en Cundinamarca.
Además, Casabianca, Villahermosa, Murillo, Líbano, Lérida, Ambalema, Armero y Honda, en el Tolima, se encuentran en riesgo por el paso de los ríos Azufrado y Lagunilla, desde su nacimiento hasta su descarga en el río Magdalena. El río Recio generaría afectaciones por atravesar los municipios de Murillo, Líbano, Lérida, Venadillo y Ambalema, en el Tolima. Los ríos Claro y Chinchiná afectarían a Manizales y los municipios caldenses de Anserma, Neira, Palestina, Chinchiná y Villamaría.