Israel ha exhortado a los civiles de la ciudad de Gaza a dejar sus viviendas, para no servir de escudos humanos a Hamás, y refugiarse en la mitad sur de la Franja, pero al mismo tiempo ha continuado bombardeando también la zona sur, como corroboraron este domingo las Fuerzas Armadas israelíes.
Jerusalén (EFE).- El número de muertos por los bombardeos incesantes de Israel ya alcanza los 2.329, superando el saldo total de la guerra de 2014 que duró casi dos meses y que era hasta ahora la más cruenta vivida en el enclave palestino.
Los ataques indiscriminados israelíes han causado además 9.042 heridos, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad gazatí, que ha tildado de “limpieza étnica” la campaña israelí desencadenada por el ataque sorpresa hace una semana del grupo islamista Hamás.
Además, con 54 palestinos muertos, la primera semana de la guerra ha resultado ser la más mortífera para los habitantes de la Cisjordania ocupada, al menos desde el fin de la Segunda Intifada en 2005.
Por su parte, el Gobierno israelí confirmó este domingo que más de 1.400 personas murieron en Israel desde el comienzo de la guerra con las milicias de Gaza el pasado sábado 7 de octubre y que al menos 120 fueron secuestrados y llevados a la Franja como rehenes.
El Ejército israelí mató anoche a Bilal al Kedra, un comandante del brazo armado de Hamás en Gaza que habría liderado un ataque contra un kibutz el sábado de la semana pasada, según informó este domingo un portavoz militar que precisó además que los bombardeos sobre la Franja continuaron durante la madrugada.
Según el Ejército “otros agentes terroristas de Hamás y de la Yihad Islamica murieron” en el ataque, que se llevó a cabo con aviones de combate y en base a información prevista por el Shin Bet. Los bombardeos de esta madrugada no se limitaron a la ciudad de Jan Yunis, en el sur de Gaza, sino que se extendieron también a la ciudad de Gaza y a Jabalia, en el norte.
En El Cairo, el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, denunció hoy que Israel intenta “liquidar la causa palestina a costa de los países vecinos”, en referencia al ultimátum del Estado judío a que los palestinos de la Franja de Gaza se desplacen hacia el sur ante una eventual invasión terrestre del enclave.
El portavoz de la Presidencia egipcia, Ahmed Fahmy, emitió este comunicado del Consejo de Seguridad Nacional, presidido por Al Sisi y compuesto por los principales mandos militares, de Inteligencia y otros cuerpos de seguridad que se reúne en ocasiones de emergencia en el país del Nilo.
Al Sisi propuso además una cumbre regional para abordar el desarrollo de la crisis bélica y humanitaria en la Franja de Gaza y “el futuro de la causa palestina”, según una resolución aprobada por el Consejo de Seguridad Nacional egipcio.
Por otra parte, el Gobierno egipcio insistió en que facilitará la llegada de los extranjeros que se encuentran atrapados en la Franja de Gaza bajo los intensos bombardeos de Israel, pero antes de ello busca certezas y que las embajadas tomen “medidas de verificación de los documentos” de sus nacionales.
Egipto también quiere que se den los permisos “para enviar ayuda humanitaria y suministros para aliviar la presión” sobre los civiles de Gaza”, una de las condiciones del país para permitir el uso del paso de Rafah, el único punto de salida de la Franja que no está en manos de Israel.